jueves, junio 28, 2007

LOS GRAVES PELIGROS DE LA REENCARNACIÓN


Friedrich Nietzsche uno de los inmortales de la filosofía universal afirmó que “NO SE PUEDE ENCONTRAR LO QUE NO SE BUSCA”. Y es que el ser humano construye conocimiento a partir del momento que se pregunta. Si el hombre no cuestiona no se formula preguntas, no está de ninguna manera construyendo conocimiento objetivo, es parte importante de ese proceso organizador de sus modelos abstractos. En definitiva; todo aquello que nos invita a la reflexión, al cuestionamiento etc.. se convierte en el precioso combustible que mueve el motor de nuestro intelecto y en relación a esto, estaría de acuerdo con J.J. Benítez autor del Caballo de Troya cuando afirma que “LOS MISTERIOS NO DEBEN SER REVELADOS”. En ese sentido, ya sea la ciencia ficción, la magia, los fenómenos paranormales y todo aquello que escapa a nuestra experiencia sensorial se constituye en la piedra angular para la construcción de nuestro conocimiento trascendente. Sin embargo el escultor de experiencia, determinará primero si trabajará sobre granito o sobre mármol y para esto es necesario en nuestro caso; contextualizar la génesis de algunos conceptos.

Es evidente la presencia de un tipo de conocimiento antiguo que no obedece a nuestros patrones de razonamiento lógico, más por sus aspectos de funcionalidad que de finalidad. Dos ejemplos clásicos y suficientes para demostrarlo es el Yoga y la Acupuntura entre otras, que reflejan un cuerpo conceptual coherente; “UN TODO”. Pero la idea fundamental no es demostrar si eso es ciencia o seudo ciencia, si es mejor o no a nuestros métodos, sino simplemente determinar la presencia de de un conocimiento que no corresponde a nuestro ciclo de desarrollo tecnológico. A mi manera de ver es una ciencia de tipo deductiva y la nuestra es una ciencia de tipo inductiva con todas las consecuencias que estas diferencias implican.

Por otra parte, ningún conocimiento es absoluto, estos van reorganizándose y transformándose en la medida que nuestros modelos abstractos de la realidad que percibimos se van modificando. Dicho en otras palabras, el conocimiento no es estático, máxime si el objeto de conocimiento es el hombre mismo que por demás está decir es altamente dinámico. Recordemos como después de que Isaac Newton postulara la ley de la gravedad, los más connotados científicos proclamaron “NO QUEDA NADA POR DESCUBRIR..” y ya vimos lo que Eistein hizo con ella, además de demoler la geometría Euclidiana CONSIDERADA COMO VERDAD FUNDAMENTAL POR MÁS DE DOS MIL AÑOS. Es pues una prueba fehaciente de la relatividad del conocimiento, por otro lado por que no decirlo, ninguna ciencia escapa a la ideología en que esta se desarrolla, de aquí que todo depende en mucho del ojo con que se vea y de la vara con que se mida. Por supuesto que no estamos legitimando el RELATIVISMO NIHILISTA al que considero CONTRARIO A TODO PROGRESO HUMANO máxime si nos referimos al relativismo ético.

La importancia de la relatividad del conocimiento objetivo está más relacionada con el tema por la interdependencia que existe entre el conocimiento intuitivo y los modelos abstractos con que interpretamos nuestra realidad. Nuestras percepciones intuitivas no pasan integras a nuestro conciente, sino que este es modificado en mayor o menor medida por dichos modelos. Para los que creen en los Sueños cuyo significado no entendemos, este sería un caso típico

Un aspecto muy importante que no puede pasarse por alto es el relacionado con las formas de transmisión del conocimiento. Sin el más mínimo interés de juzgar a las sociedades teocráticas de la antigüedad, en el que el conocimiento era patrimonio de una ínfima minoría; la clase sacerdotal; la actividad social y hasta las normas más elementales de convivencias y sanidad humana se trasmitían en forma de dogmas religiosos o leyes divinas. Por ejemplo si la carne de cierto reptil generaba infertilidad en el hombre por decir algo, su ingestión era elevada a rango de pecado mortal. Ahora sabemos los problemas de ingerir carne de cerdo criado en ambientes no controlados, igual sobre los elevados niveles de creatinina (toxinas) de ciertos animales de caza o la imperiosa necesidad de medidas higiénicas para prevenir la difusión de enfermedades venéreas en ambientes sanitariamente duros. En lo político vemos como el rey era proclamado representante de Dios sobre la tierra, una manera de instaurar la incuestionabilidad del gobernante y de paso minimizar el alto índice de asesinatos políticos entre otros. La lista es interminable y abarca desde las fechas y métodos de cultivo hasta la conformación familiar y social. Esto tiene que ver más con el modelo con que se administra el conocimiento que con el conocimiento en sí mismo, ya que todo evidencia que en la mayoría de los casos, las regulaciones divinas por así decirlo tenían un fundamento. Y de lo menos que podemos juzgar a los poseedores de estos conocimientos es de no tener conocimiento; no es un simple pastor de cabras quien construye una pirámide como la de Egipto, ni es una cultura de salvajes quien cuenta entre sus adquisiciones intelectuales el cero matemático y más de quince variedades cultivables de maíz (los Mayas), calendarios sobre los eclipses lunares y el planeta Venus entre otros, tan precisos como los actuales. Es pues un problema de la ADMINISTRACIÓN DEL CONOCIMIENTO Y NO DEL CONOCIMIENTO EN SÍ.

No es posible hablar de conocimiento en forma retrospectiva sin abordar el problema de su pureza conceptual. Debe recordarse que en el estado teocrático no existe separación estado-iglesia, no debe sorprender a nadie que los dogmas religiosos en buena parte obedecían a determinada estrategia política de los grupos dominantes, que a medida que las sociedades se tornaban más complejas, se adicionaban al clero, sectores de políticos, comerciantes, militares etc., con cuotas de poder que tenían que reflejarse en la estructura ideológica. El caso es más patético cuando se sucedía una invasión militar de más allá de sus fronteras culturales. Los vencedores impondrán un esquema de control ideológico que en muchos casos se da no por la abolición total de los elementos que conforman la estructura ideológica, sino más bien por el reemplazo o la modificación de algunos de ellos para que pueda ser fácilmente aprehendible por el grupo vencido. Sucedió en la América Colonial, en el viejo mundo romano y sigue sucediéndose en todas aquellas partes dónde hay un proceso de colonización, aún cuando los métodos varíen de una época a otra o de un actor a otro. Nótese que no me refiero en ningún momento a si la medida, intención o finalidad sea buena o mala, sólo a como se modifican las estructuras ideológicas y a que podemos atenernos en cuanto a preservar cierta pureza a través de la historia. En este sentido, la India no está exenta de estas variables, de hecho sufrió la invasión aria casi desde los inicios de nuestra historia escrita, y que por cierto instauraron el sistema de Castas en dicha región.


Coincidencia o no, yo creo que no, pero a cada cultura está asociada una estructura religiosa que le es característica; no podemos hablar de cultura occidental sin cristianismo que aunque no profesemos una filiación explícita, hay consecuencia de principios y sus conceptos están de una u otra manera, insertos en todos los estamentos de nuestra actividad temporal. En las sociedades modernas dónde se da una separación iglesia-estado, los modelos se van modificando aunque lentamente por efecto de una interacción dinámica entre iglesia y demás estamentos de la sociedad civil, dinámica que es perceptible en los desplazamientos de creyentes de una nominación religiosa a otra o bien en la aparición y desaparición frecuente de nuevas nominaciones. Vemos pues que aún en nuestra cultura occidental se pueden encontrar sociedades más adquisitivas que otras, fenómeno claramente explicable por medio de sus conceptos religiosos. Con esto no quiero decir de que exista una religión de los pobres y una de los ricos; sino solamente la influencia de los principios dentro de la dinámica social.


En relación a la reencarnación, si en nuestra sociedad hay desempleo, desnutrición o crecimiento en los índices de pobreza no vacilamos en atribuirlo a la mala administración pública, y si un vecino me afirma que su hermoso gatito es la reencarnación de algún anticristo, no dudo en suponer que no quiere verlo en el plato de algún menesteroso. Tampoco creemos que la maldad este disminuyendo cuando nos dicen que las especies están en extinción. Esto lo que demuestra es la poca articulación que tienen algunos conceptos con nuestra estructura ideológica a pesar de que según algunas estadísticas el 30 por ciento de los cristianos creen en la reencarnación y un porcentaje un poco menor en la ley del Karma.

Es realmente impresionante la cantidad de definiciones o interpretaciones que pueden encontrarse sobre algunos conceptos tales como el Karma y la Reencarnación y más impresionante todavía es la aplicación indiscriminada de estos conceptos en forma fragmentaria y reductiva. Debemos decir que en nuestro caso, el TODO es SINERGICO, los conceptos por si mismos o en forma aislada NO EXPLICAN NI EL CONCEPTO NI EL TODO. No debemos aplicar conceptos que no están articulados a los modelos con que interpretamos nuestra realidad, independientemente de cual sea este. El sacerdote Tibetano Lobsan Rampa afirmaba: “Si usted es Cristiano, no se haga Budista, porque va a ser un mal Budista”; es claro que no se refería a la imposibilidad de que un cristiano pueda convertirse al Budismo, se refería a la necesidad de tener concepciones integrales.

En varias oportunidades he mencionado al Dr. En Física Álvarez López al afirmar de que “hay una relación de causa y efecto entre ciencia moderna y destrucción del ser humano” y no por que considere que la ciencia o el conocimiento en sí sea destructivo, el problema está en su aplicación dentro de conceptos fragmentarios y reductivos de la realidad, el caso más elocuente es el daño irreversible que nuestra tecnología le está generando al ecosistema, estamos hablando de cómo se articula este conocimiento dentro de una concepción ideológica.
De igual manera, cualquier conocimiento o teoría que en su articulación dentro de una cultura desconozca el libre albedrillo del hombre o limite su capacidad creadora, es intrínsicamente peligrosa.
Asumir que el estadio de una persona es y estará determinado por factores que escapan a su quehacer temporal es un asesinato al espíritu humano y un atentado contra el desarrollo social de la humanidad.
Una mala aplicación de principios puede llevar a un vegetariano por el camino de la enfermedad, de igual manera LA APLICACIÓN INADECUADA DE ALGUNOS PRINCIPIOS COSMOGÓNICOS PUEDEN CONDUCIR AL SIMPATIZANTE POR EL CAMINO DE LA FRUSTRACIÓN Y DE LA POBREZA.

NO se trata de negar a la pobreza como medio de enriquecimiento espiritual, de hecho creo que son los pobres y los inadaptados los agentes de cambio; o como dirán los científicos sociales; el elemento entrópico ( desorden) dentro del sistema social. Desorden que de una manera u otra es el agente de cambio “por defecto” valga la aclaración, que modificará el sistema social. Sin embargo hay un límite por debajo del cual, ese estadio deshumaniza al hombre, tanto al que lo padece como al que lo permite o justifica.

En cuanto a si existe o no la Reencarnación, puedo decir de que hay una serie de fenómenos paranormales por así llamarles, que están ampliamente fundamentados, a como también hay un cantidad aún mayor que no lo está, eso por supuesto no quiere decir que sean necesariamente falsos pero de que sí habría que analizarlos con mayor profundidad. Por otra parte debe recalcarse de que mucho del conocimiento antiguo es fragmentario más por el tipo de transmisión que por otra cosa, y con frecuencia un fenómeno a menudo elevado a rango de ley cosmogónica por alguna nominación de nuestro tiempo, no guarda ninguna relación con otra. La articulación de los conceptos o principios que en definitiva conforman el cuerpo doctrinal que nosotros conocemos a quedado bajo la responsabilidad de sectas, sociedades secretas o bien escuelas místicas. Por decir algo; en el antiguo Egipto llegaron a operar tres escuelas diferentes que articulaban de diferente manera los mismos principios, ya no hablar de la escuela de Akenatón el faraón monoteísta cuyos conceptos cosmogónicos se apartaron drásticamente de las de Amón y las de Ra, este no es un fenómeno que se diera solamente en Egipto, se dio en la India, en Roma, Grecia y en todo el mundo y en todas las épocas.
Tiene tantas implicaciones el concepto de la Reencarnación que particularmente me apego a la posición conservadora: “Debe ser una Experiencia Personal”.

Para los que no deseen acudir a procedimientos intuitivos, un buen punto de partida es considerar que todo ACTO CREADOR o estadios transitorios como lo pueden ser EL NACER Y MORIR. Se dan dentro de PROCESOS EMINENTEMENTE DIVERGENTES. Procesos en los que LA UNICIDAD DA PASO A LA MULTIPLICIDAD; LA INDIVIDUALIDAD A LA DIVERSIDAD.
Otro aspecto a considerar es de que si bién las leyes de la causalidad (Causa y Efecto) existen, estas distan en mucho de ser los instrumentos más adecuados para explicar el fenómeno de la Vida. Esta concepción hoy conocida como Aristotélica, ha dado paso a concepciones más modernas dónde se contemplan procesos de diferenciación, integración, retroalimentación, propulsión etc. nuestros modelos mentales conque estamos interpretando al Hombre, al Universo y a Dios mísmo, ya han tenido modificaciones sustanciales. Así que debemos tener precaución cuando las aplicamos.
Quizás sea un poco complicado porque lo analizamos dentro de NUESTRA EXPERIENCIA TEMPORAL que es INTRÍNSICAMENTE CONVERGENTE Y LA GENERADORA DE INDIVIDUALIDAD.

sábado, febrero 10, 2007

EL PODER DE LA TRANSFORMACIÓN

Eliphas Levi, sacerdote y profesor de un seminario en París, publicó sus obras de magia y ocultismo por los años 1,860; por supuesto que después de haber sido expulsado de la iglesia dada sus concepciones poco ortodoxas.

La obra de Levi es muy abundante y por su formación intelectual, combina muy creativamente la magia con la teología, en muchos aspectos creo que alcanza profundidad.

Uno de los aspectos más relevantes de su obra, es lo que denomina como El Poder de la Transformación, la Verdadera Vara de Circe o el baño de Medea.

Es toda una metodología para poder llegar a influir sobre el comportamiento de segundas personas.

Según la teoría de Eliphas, los instintos son equilibrados por instintos contrarios y dominados por instintos más fuertes que aquellos. Si uno es un perro y quiere que un hermoso gatito le ame, tiene solo una forma de lograrlo: metamorfoseándose en gato.
Esta metamorfosis se logra mediante la observación, la imitación y la imaginación.

De acuerdo a esta técnica uno debe concentrar en uno mismo las cualidades de absorción para dirigir sus rayos hacia un foco absorbente, y viceversa. En teoría si uno quiere actuar magnéticamente, imagina que la persona a influir es un ratoncillo y que uno es un gato y el resultado será que se le capturará.

En este procedimiento se recurre a la figura de animales ya que estos son los símbolos vivos de los instintos y pasiones. A un hombre se le puede hacer tímido convirtiéndolo en liebre, o agresivo si se le hace un tigre.

El procedimiento en teoría consiste en polarizar magnéticamente según las cualidades del animal que mejor describe la situación que querríamos resolver.

Probablemente estoy siendo un poco injusto con Levi por el poco espacio que dedico a explicar sus teorías y técnicas para el proceso de transformación como instrumento de poder, pero realmente la idea no es hacer un curso sino explorar la teoría.

Esta tesis no es nueva, en su esencia era la metodología empleada por algunos chamanes, magos del viejo mundo en la antigüedad y por tribus indígenas tanto en África como en América, o sea que son procedimientos que formaron parte importante del desarrollo de la magia y de las ciencias ocultas. Con esto no pretendo desvirtuarlos ya que entiendo que todavía existen en algunas organizaciones de este género, así como muchos devotos a la obra de Levi, Tampoco la idea es negar el aporte de Eliphas Levi a esta disciplina, que realmente creo fué uno de los primeros en darle oficialmente un marco metodológico y en establecer una relación causa efecto. Sin embargo; ninguna ciencia, experiencia o conocimiento, permanece estático. La Física no se quedó en Newton ni la biología en Darwin etc.

Como metodología hacia un propósito creo que es perfectamente válido y efectivo, de hecho la psicología moderna se vale de algunos de sus principios y como dice el adagio, muchos son los caminos que conducen a Roma.

En su misma obra Levi hace la importante observación de que ninguna metamorfosis puede ser lograda sin destrucción. Para cambiar un halcón en una paloma, primero debe matársele y destruir todo rastro de su primera forma, para luego renacer en paloma. Yo por mi parte agrego que esto es válido tanto para el receptor como para el trasmisor, existe un peligro real de que el trasmisor deje de ser lo que es para quedarse halcón, figurativamente hablando.
A cómo el mísmo Eliphas lo afirma, culquier proceso de transformación, se inicia en el practicante, habría que valorar si la destrucción es controlada y hasta dónde es puntual.

Las ciencias ocultas como todo, ha ido evolucionando y creo que existen metodologías con concepciones un poco más modernas para lograr el mismo propósito que creo no ha cambiado en nada desde que el hombre es hombre. Los mismos evangelios lo afirman, si tuvieras fe como un grano de mostaza, moverías montañas, el poder le fue dado al hombre en gracia. Como dijo Jesús; porque no eres ni frío ni caliente…. Buscamos los sustitutos de la fe porque no entendemos ni el concepto mucho menos sus mecanismos y la FÉ auque la mayoría de nosotros la relacionemos con la religión, absolutamente nada que ver, es un elemento importante dentro de los procesos cognitivos del individuo, la aplicamos en forma automática en todo momento que construimos conocimiento, es un elemento vital para las modernas concepciones de las ciencias ocultas y del aprendizaje humano.

A manera de conclusión, pienso en la teoría de Eliphas como una metodología con serios problemas por los efectos colaterales para el practicante, agravado si no existe la supervisión de alguien debidamente preparado para al fin.